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Todo lo que le ha sucedido al español Fernando Pons en los últimos minutos de torneo se puede resumir en una sola palabra: desgracia.
El que fuera finalista del torneo más importante del mundo en 2016, se encontró con una sucesión de manos que lo dejaron muy tocado. En la primera, cuando la mano limpia le llegaba limpia a la ciega pequeña, Pons veía sus jotas saltar por los aires cuando el jugador de la ciega grande levantaba jotas.
En la segunda, tras una sucesión de subidas y resubidas, Pons terminaba foldeando a un five-bet de su rival cuando tenía as-rey. El fold fue espectacular porque su oponente tenía dos ases que mostró al respetable, pero dejó a Pons bastante tocado.
Con solo 120.000 puntos, Pons decidió que era el momento de jugársela moviendo su stack al centro con 
desde UTG. Toda la mesa se tiraba, pero cuando la acción llegaba a Rodrigo Marques este la pagaba con 
.
El board trajo 
en el flop, lo que dio algún out más a Pons. El problema es que el turn fue un 
, que no cambió nada, y el river un 
que sentenciaba al mallorquín a la eliminación.
Una pena, Pons tenía la oportunidad de desbloquear un nuevo logro en su carrera, pero eso tendrá que esperar.
