Tenía preparado el plan Carlos Ávila cuando limpeó en UTG en el tercer nivel de juego: 75/150, pero por desgracia para él no salió como esperaba.
Tras su limp, Maksin Isaev roleaba a 600 puntos y Eduard Muñoz y Albert Grané se unían desde las ciegas. Sin embargo, Ávila tenía otros planes. El jugador local hacía three-bet a 1.650 puntos, pero con eso no lograba sacarse de encima a nadie.
El flop trajo y tras el check de Muñoz y Grané, Avíla lanzaba una continuación de 2.200 puntos. Isaev se tiraba, Muñoz pagaba, y Grané también ponía cuerpo a tierra.
El turn fue un y los dos optaron por pasar para ver aterrizar un en el river. Muñoz pensaba unos segundos y apostaba 1.100, pero se encontraba con la resubida instantánea de Ávila, que empujaba una apuesta de 3.500 puntos.
No necesitó de mucho Muñoz para pagar y, para su sopresa, terminó por llevarse la mano con cuando Ávila mostraba .