La historia de Kristen Bicknell en esta mesa final del Super High Roller 25.000€ 2 millones garantizados ha sido de esas para olvidar. A pesar de que el suyo era el sexto mejor stack al inicio de la mesa final, Bicknell no ha podido superar la octava posición tras una sucesión de catastróficas desdichas.
La jugadora canadiense, miembro del Team Pro de partypoker, vio como la cosa se le complicaba después de tener que foldear la mayor parte de las manos que abrió, y tras un par de horas de mesa final cayó eliminada a manos de Rainer Kempe, le asestó el golpe definitivo con un bad beat que a Bicknell le costará olvidar.
Kempe () y Bicknell () terminaban all in preflop con clara ventaja para la jugadora de partypoker, pero el board terminó por darle la espalda. El dealer descubría en el flop y el diez iba a ser demasiado para Bicknell. El turn fue un que no cambió nada y el river un que finiquitó las opciones de Bicknell, que se despedía con un premio de 60.000€.
Con su eliminación, el resto de jugadores se garantizan 90.000€.