Con el stack más corto de los tres supervivientes de este Super High Roller, Erik Seidel vio como se le abría el cielo cuando la mano le llegaba limpia a Andreas Eiler a la ciega pequeña y este se movía all in. Seidel tenía as-diez y un call bastante fácil para intentar doblarse y meterse de nuevo en la pelea.
Eiler tenía y vio como el flop traía un as, , pero también cómo se le abría un proyecto de color con su siete de diamantes. El turn fue un que no cambió nada, pero, como suele suceder en estos casos, el river terminó por cambiarlo todo. La dealer destapó un que completaba el proyecto de Eiler y dejaba a Seidel eliminado en tercera posición con un premio de 300.000€.
El torneo alcanzaba entonces el heads-up, que se decidirá entre dos jugadores alemanes.