Cuando desde una mesa contigua escuchamos a Pedro Cairat moverse all in en una mano contra Carlos Sánchez, no tardamos demasiado en acercarnos, pero cuando lo hicimos Sánchez ya había hecho call.
El canario había apostado 1.500 puntos en el river tras el check de argentino, pero este se movía all in con un stack menor. El board mostraba y el de Sánchez iba a ser demasiado para el de Cairat, que debía abandonar el torneo mucho antes de lo que le habría gustado.