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Cuando uno tiene la oportunidad de moverse entre las mesas de un torneo de primer nivel como el 25.000€ Super High Roller de esta Gran Final del partypoker MILLIONS, se da cuenta que no es oro todo lo que reluce. Estamos acostumbrados a ver a nuestros jugadores favoritos a través de nuestra pantallas de ordenador o televisión y cuando te topas con ellos de frente algunas veces incluso se hace difícil reconocerlos.
No es el caso de Stephen Chidwick, al que es muy fácil localizar, incluso desde el otro lado de la poker room. El británico, que entre los jugadores de alto nivel se había ganado el apodo de "pupas" por su facilidad para llegar hasta las fases finales para terminar quedándose a las puertas de la victoria, lo está bordando en este 2018 y eso le ha permitido quitarse gran parte de la "sal" que le acompañaba torneo tras torneo.
Con un nivel superlativo en la mayor parte de los juegos, tanto en las mesas online como en los tableros en vivo, Chidwick ha sido reconocido desde sus inicios como uno de los talentos más importantes de Europa. Eso le ha llevado a conseguir más de 12 millones de dólares en premios, aunque todavía tiene pendiente retos como el de conseguir hacerse con un brazalete de las World Series of Poker.
Con solo 28 años de edad, el británico ha comenzado el año con fuerza, logrando dos triunfos y un tercer puesto en el famoso US Poker Open disputado en Las Vegas, o alcanzando mesas finales en enventos de renombre como la Super High Roller Bowl China o el APPT Macau, en los que logró más de 1,5 millones de dólares.
Hoy en día su figura luce de otra manera. Su aura deslumbra desde cualquier esquina de la sala de juego, y nos extrañaría bastante no verlo levantando un título durante los próximos días. Está en forma y él lo sabe. Se nota en su manera de afrontar cada mano, cada decisión, cada contratiempo.
Habrá que estár atentos porque si las cosas le salen como ha planeado tendremos una buena dosis de Stephen Chidwick durante los próximos días.
