Manejar perfectamente tu stack inicial es una de las quimeras de cualquier jugador en la fase inicial de un torneo de póker. Es verdad que el extendido sistema de re-entries ha hecho perder incidencia a esta fase, pero aún así, a nadie le gusta tener que volver a pagar si es posible evitarlo, y damos fe de que todos intentan esquivarlo cuando se sientan a la mesa.
Este arranque del Main Event de las Flip Flop Series no ha sido diferente, pero de vez en cuando nos encontramos con situaciones casi imposibles de evitar. En una de las primeras manos del día, si es que no era la primera, nuestro repaso a la mesas nos llevó a la de Sergio Alonso Camuñas, un jugador bastante conocido por estos lares.
Al llegar, vimos a tres jugadores enzarzados en una mano, y a nuestro protagonista apostando bastante fuerte en un flop que había mostrado
El jugador en la ciega pasaba, pero Sergio Alonso lanzaba al medio una apuesta igual al tamaño del bote, lo que suponía la mayor parte de su stack. El jugador de su izquierda se ponía entonces a tankear, porque un mal paso podía dejarlo sin fichas a la primera de cambio, y mientras lo hacía el jugador de la ciega, de forma algo precipitada, decidía perdirle tiempo.
Con la presión sobre sus hombros, y tras pensar un poco más por deferencia del director del torneo, el jugador decidía foldear (después contó que tenía ases) para dejar que fuese la ciega el que decidiese qué hacer.
"He pedido tiempo porque estaba nervioso", reconocía poco después el jugador en la ciega. "He pedido tiempo porque tenía as-rey y tenía claro que iba a pagar".
Sin embargo, su as-rey no fue suficiente para superar a los reyes con los que Alonso había flopeado full, y que le permitían subir al liderato tras solo unos minutos de juego.
En definitiva, doblarse en los primeros niveles de un torneo es fácil, pero para eso hay que tener mucho naipe, y esperar a que te sirvan el cooler en bandeja de plata.