Alejandro Auset burbuja del premios del Main Event

Una burbuja mucho más larga de lo esperado acaba de romperse en el Main Event con la eliminación de Alejandro Auset en el puesto 46.

En varias ocasiones estuvo a punto de explotar la bubble, pero en todas el jugador corto logró doblarse para pasar la presión al resto de short-stacks.

El primero en poner su stack en juego fue David Murillo. La mano le llegaba limpia a Arne Michaelis al botón y el jugador alemán iniciaba la acción con una apuesta de 16.000. En la ciega pequeña, David Murillo anunciaba all in por 71.000 puntos, y la mano llegaba hasta Alex Corbalán en la ciega grande. Corbalán se ponía a pensar, y terminaba pagando para poner en riesgo a Murillo después de que Michaelis decidiese rendirse.

Murillo:

Corbalán: [h]

El board traía un rey en la ventana, , y Murillo saltaba de alegría hacía el rail para celebrar con todos aquellos que estaban pidiendo una de sus cartas.

El siguiente en encontrarse en situación de riesgo fue Angelo Benazzi. En una guerra de botón contra ciegas, Benazzi terminaba all in contra Carlos Chanca.

Chanca:

Benazzi:

Benazzi estaba en peligro, pero sus ases aguantaron después de un board que mostró y que le permitió respirar tranquilo.

Una nueva situación de all in y call se vivió poco después, y fue, probablemente, la más emocionante que hemos vivido en mucho tiempo. Miquel Sole, que tenía uno de los stacks más potentes de la mesa, y también del torneo, decidía shovear una vez que la mano le llegaba limpia. Todos los jugadores que quedaban por hablar estaban en situación comprometida, pero Gabriel Podovei se armó de valor para anunciar su all in justo a su izquierda.

En esa mesa había un jugador con apenas dos ciegas, y en la mesa de al lado otro, por lo que el all in de Podovei parecía algo justo, aunque Dios nos libre de juzgar su decisión. Cuando el resto de jugadores se tiraban, ellos dos daban la vuelta a sus cartas.

Podovei:

Miquel Sole:

Con un gran número de jugadores viendo la acción desde la barrera, el dealer dio la vuelta a un flop demoledor para Podovei: . El run run entre los espectadores no se hizo esperar. Mientras tanto, el dealer destapaba un en el turn que no cambiaba nada. Con la tensión del momento a flor de piel, y con tan solo 2 outs, Podovei recibió con enorme alegría la que apareció en el river y que le salvaba la cabeza en el último momento.

Los nervios comenzaron a apoderarse de aquellos jugadores que se creían salvados de la criba, y la tensión aumentó aún más cuando Liutauras Armanavicius, que se había quedado con solo 2.000 puntos en la ciega grande, conseguía doblarse contra Juan Domínguez.

Domínguez se movía all in en UTG y conseguía que todos los que le cubrían se tirasen para enfrentarse con el lituano.

Armanavicius:

Domínguez:

El flop ya hizo presagiar que algo raro iba a pasar mostrando , pero el turn rebajó la tensión descubriendo una . Todo parecía finiquitado, pero el river trajo un que lo cambió todo, y que mantenía la burbuja viva al menos durante una mano más.

Y decimos una mano más porque en la mesa de al lado Alejandro Auset estaba en UTG con un stack de 5.000 puntos que ni siquiere le llegaba para cubrir los 8.000 puntos de la ciega. Auset vio en ese momento sus cartas y con resignación decidió ir all in desde UTG poniendo en riesgo su torneo y la posibilidad de irse a casa con un premio en el bolsillo.

En posiciones medias, Tony Yu decidía pagarle, lo mismo que hizo Miquel Sole en la ciega pequeña antes de que Gabriel Podovei se diese check en la grande.

Los tres jugadores que todavía tenían fichas se daban check hasta el river de un board que mostró , y llegaba el momento del showdown.